Presidentes de Diputación Siglo XIX

El estudio de los Presidentes de Diputación para este periodo está marcado por la coincidencia de dicho cargo con el de Jefe Político de la Provincia o Gobernado Civil, denominaciones que irán cambiando con las diferenctes legislaciones.

Para el seguimiento de los Presidentes a lo largo de la mayor parte del siglo XIX nos hemos centrado en dos fuentes documnetales, que son los Libros de actas de Diputación y los Boletines Oficiales de la Provincia de Granada.

La información extraída de los libros de actas la contrastamos con los boletines, ya que los Gobernadores son nombrados por Reales Decretos que se insertan y publican en ellos y además, firman todas las instrucciones, curculares y en general toda información pública y oficial, ya sea desde el Gobierno de la Provincia o desde la Diputación.

En las sesiones en las que no está presente el Gobernador será sustituido por un presidente interino o accidental, que podrá ser el Intendente, el Secretario del Gobierno, el Vicepresidente del Consejo, el Diputado de más edad, etc.

Esta situación irá cambiando según evolucione su regulación en las leyes provinciales. Destacamos aquí las más significativas:

• Instrucción de 3 de febrero de 1823 para el Gobierno Económico-Político de las Provincias (Capítulo II Artículo 181)
• Ley de 8 de enero de 1845, de Organización y Atribuciones de las Diputaciones Provinciales (Gaceta de Madrid de 15 de enero, Artículo 40)
• Ley de 2 de abril de 1845 para el Gobierno de las Provincias (Artículo 3º)
• Ley de 25 de septiembre de 1863 del Gobierno y Administración de las Provincias (Título II Capítulo I Artículo 9º; Título III Capítulo IV Artículos 36 y 37)
• Ley Provincial de 20 de agosto de 1870 (Artículos 10, 13, 26 y 28)
• Ley Provincial de 2 de octubre de 1877 (Gaceta de Madrid nº 277, de 4 de octubre, Artículos 9, 23 y 25).
• Ley Provincial de 29 de agosto de 1882 (Gaceta de Madrid nº 244, y 1 de septiembre, Artículos 28, 46 y 51)

La realidad que se observa en la documentación no siempre coincide con lo estipulado en las leyes. Las fechas de posesión y cese de los cargos a veces es confusa y difícil de constatar, además de los problemas derivados de la existencia de lagunas documentales, pero podemos aproximarnos bastante tomando como referencia otros hechos como el nombramiento del sucesor, la última o la primera vez que firma las actas o el boletín, etc.